No está fácil, ni para mi ni para nadie y es por la presión que nos auto imponemos más que por la cuarentena en sí. Es como por el hecho de estar consciente que la cuarentena existe, ejercemos presión en nosotras y en nuestras manías de no poder dejar de hacer cosas o ese gusto por estar ocupadas todo el tiempo, así como creyendo que el encierro tiene que ser muy similar  a nuestra vida normal. Por lo menos eso me pasa a mi y se que no es la forma correcta de afrontarlo.

Hace unos años sigo una siquiatra en Instagram, que además tiene estudios en moda, no tiene mucho que ver eso con lo otro, pero digamos que la sigo por la moda no por siquiatra, pero en estos tiempos difíciles se ha dedicado a dar consejos por IGTV y me ha hecho super bien escucharla, si la quieres seguir su IG es @mariacarrasco.

Es difícil que yo cambie pero he tratado de entender y poner en práctica alguno de sus consejos, los dejaré acá:

  • Está bien estar preocupada
  • Está bien no producir
  • Está bien estar enojada con el gobierno
  • Está bien ignorarlo
  • Está bien querer hablar de esto
  • Está bien si no quieres hablar de esto
  • Está bien hacer ejercicio
  • Está bien quedarse acostada en el sofá

Yo en particular, soy muy “ocurrente” en mi vida normal y también lo he sido en cuarentena, he cocinado las cosas más creativas y ricas de la vida, todos los días se me ocurre algo distinto. Hoy conversaba con un amigo y me decía que a él también le ha pasado y que hizo una torta de panqueques con verduras, gueas que obviamente en su rutina real jamás haría.

Hoy les voy a compartir mi rutina, que traté de estructurar un poco para no perder los estribos y mantener mi mente en equilibrio.

8 am despertador

9 am me levanto a penas

9.30 am tomamos desayuno

9.40 am termino de tomarme el café acostada en el sillón

10 am ducha a penas

10.30 am hago la cama

11 am recién me siento a trabajar

11.30 am me levanto a hacer otro café

12 pm todavía no logro concentrarme

12.30 pm empiezo a pensar qué voy a cocinar de almuerzo

13 pm empiezo a hacer el almuerzo

14 pm almorzamos y quedamos terrible jennifer todos los días

14.30 pm me tomo otro café acostada en el sillón

15 pm mientras los gatos duermen su siesta yo leo un capítulo de mi libro

16 pm me levanto a mi escritorio de nuevo, a trabajar y a hacer algún curso en línea

17 pm voy por algo para comer, normalmente queque o kuchen con café/ día por medio hago deporte sagrado.

18 pm veo youtube, avanzo en mi bordado, saco fotos de la casa, de los gatos y de nosotros, rocío con agua las plantas, ordeno alguna cosa o cambio cosas de posición, veo instagram y twitter, escribo un post (a esta hora me pongo más ansiosa)

19 pm lavamos loza y tomamos once con el gino

20 pm escucho un podcast

21 pm lavo ropa, hago un queque o lavo loza (hora doméstica).

22 pm me acuesto a leer un libro o a ver una serie

23 pm me duermo

repeat

Como ven, he sido 80% menos productiva que en mi vida normal; extraño mi oficina, a mis chiquillos, irme y volver en bicicleta todos los días, salir en las tardes a andar en bici con el Gino, salir a comer y tomar algo rico. Pero está bien no serlo, está bien sentirse ansiosa, sentir incertidumbre y también esta bien buscar salidas de escape.

Yo en particular, me siento bien buscando cosas que hacer y también me siento bien descansando o ayudándome a no sentirme estresada y desesperada. Creo que depende mucho de nosotras el cómo resistimos a la cuarentena, en auto calmarnos, auto regalonearnos, auto permitirnos pensar cosas positivas en un periodo hostil como la pandemia.

Espero estén llevando bien sus días, no se presionen, no hace falta, hay que estar tranquilos porque todo esto va a pasar. Ahora es momento de hacer cambios positivos, de replantearnos nuestros hábitos y de a poco ponerlos en práctica.